Suave y sofisticada, esta versión de la clásica receta es muy fácil de preparar y se luce como pocas. ¡Es riquísima!
Ingredientes
4 pechugas de pollo.
Una cebolla rallada.
2 cdas de miel.
Un limón (jugo y ralladura).
Una cdta de jengibre rallado.
Una cdta de vinagre balsámico.
3 cdas de aceite de oliva.
Sal y pimienta, a gusto.
Procedimiento
1Rallar la cebolla y poner a sofreír en una sartén con aceite de oliva.
2Transcurridos dos o tres minutos añadir el vinagre balsámico y la ralladura de jengibre. Tapar la sartén y dejar que la cebolla caramelice unos 15 minutos a fuego bajo.
3Transcurrido ese tiempo añadir la miel, el limón y la pimienta negra. Apagar el fuego, dejar enfriar y pasar la salsa por la batidora para que nos quede una textura fina. Reservar dos cdtas de esta salsa para usar a continuación.
4En la misma sartén, añadir un poco más de aceite de oliva.
5Salpimentar las pechugas y dorarlas en la sartén junto a dos cucharaditas de la salsa reservada. Una vez esté dorado el pollo por ambos lados y cocido por dentro.
6Añadir el resto de la salsa, retirar del fuego y servir con arroz blanco.